La idea era hacer una escalera de colores que fuera dando vueltas (de ahí el título de nuestra convocatoria A vueltas con los colores) con la que recordar el poema, y esta tarde nos hemos puesto manos a la obra.
Como siempre los niños y niñas (y mamás) que han acudido al taller han estado la mar de implicados y han quedado preciosas decoradas con los animales y objetos a los que alude la poesía.
Aquí podéis ver las fotos del taller:
Ya se ha convertido en costumbre empezar a ensayar la poesía para el próximo día que nos veamos, pues entonces tocará compartirla con todos los que allí estemos.
¡Así les sale de bien cuando la recitan!
Además Rebeca hoy ha venido con su escalera para recitárnosla en clase. ¡Qué bien le ha quedado!
Otra entrada sobre su poesía.
Es genial ver a los niños disfrutar con la poesía.
Un saludo
Fue una actividad preciosa. Rebeca y yo estuvimos encantadas, rodeadas de buena gente.
ResponderEliminarLa idea de contar el cuento como si cada página fuese el peldaño de una escalera...es genial.
Alguna profe del colegio dijo que lo haría como regalo de navidad para sus sobrinos.
Es original y muy bonito.
Un beso!!
Me apunto esta idea, que me encanta.
ResponderEliminarAprendí a leer estos libros de la colección de la cuna a la luna escuhando a Pep en una sesión de formación y desde entonces nos acompañan en las sesiones de lectura.
Abrazos
Ana
La verdad es que lo pasamos genial, María José, y a los niños les gusta tanto hacer la manualidad como luego recitarla. Me alegro mucho de que a Rebeca le gustara.
ResponderEliminarAna, ya sabes que mi amor por la poesía de Antonio Rubio también parte de Pep.
Muchos besos a las tres.